viernes, 18 de noviembre de 2016

GRUPOS DE AUTOAYUDA EN EL PERU


Uno de los secretos profundos de la vida es que lo único que merece la pena hacer es lo que hacemos por los demás (Lewis Carroll, 1832-1898, Matemático y escritor británico.)



I. INTRODUCCIÓN


Los grupos de autoayuda surgen como alternativa al sistema tradicional, donde la dirección y la responsabilidad corren a cargo de un profesional. Este movimiento creció y se desarrolló a partir de los años 30, con el surgimiento de “Alcohólicos Anónimos”un grupo de autoayuda para personas con problemas de alcoholismo (Domenech, s.f ).



Roca y Villalbí (1989) citado en Domenech (s.f.), demostraron que los enfermos de cáncer  que habian asistido a un grupo de autoayuda fueron más capaces de afrontar su situación que los que no asistieron, asimismo, demostraron que determinados grupos de autoayuda para ancianos, muestran cómo estos mejoran su autoestima y la capacidad para realizar actividades.


Los diferentes grupos de autoayuda que que hoy existen, han surgido en campos tan diversos, como la enfermedad mental y física, las adicciones, las crisis vitales, y diversas problemáticas sociales.

II. CONTENIDOS 

No solo los hospitales, clínicas, congregaciones de tipo religioso  o centro de rehabilitación pueden brindar ayuda a personas con problemas físicos y mentales,  sino que existen otras formas de hacerlo, he aquí los grupos de autoayuda.


Los grupos de autoayuda son un conjunto de personas que se juntan y comparten un problema, organizados a través de   reuniones mediante las cuales algunos individuos sirven de estímulo positivo a otros

Esto grupos  permiten a las personas  con un problema en común  crear un sistema de apoyo  que les permita protegerse del estrés psicológico y les proporcione la motivación suficiente para comenzar un cambio en sus vidas.

Es así que dentro del grupo de autoayuda, los miembros comparten experiencias, se dan apoyo emocional  y social, todos aprenden y se brindan sugerencias entre ellos.

Los grupos de autoayuda en su mayoría han estado enmarcados dentro del ámbito clínico, sin embargo,  Gesten y Jason (1987) mencionan que el contribuir  a la creación de grupos de autoayuda es una estrategia inteventiva de los psicólogos comunitarios.

Existen grupos de autoayuda  a nivel internacional que fomentan diferentes temas:

Por ejemplo en Costa Rica existe un grupo de autoayuda denominada “ Mujer no estás sola”, el tema que se abarca es violencia en contra de la mujer.

En america latina se tiene el grupo Mujeres en América Latina: transformando la vida, donde  se abarcan temas relacionados a violencia en contra de la mujer, lingüística, desempleo, movimientos de mujeres y política.

Por su parte el Centro de Derechos de Mujeres (Tegucigalpa, Honduras) a creado un manual para realizar grupos de autoayuda a mujeres sobrevivientes de violencia doméstica.

GRUPOS DE AUTOAYUDA EN EL PERÚ

El Ministerio de Salud junto con la  Organización Panamericana de la Salud sistematizan las experiencias de los Grupos de Ayuda Mútua (GAM) organizados en los distritos de Independencia, La Victoria y San Juan de Lurigancho en el Perú.

Estos Grupos de autoayuda han sido conformados, organizados y conducidos por Coordinadores, provenientes de diversos sectores capacitados durante el año en el marco del Proyecto "Violencia contra las Mujeres y las Niñas" de la OPS y el Ministerio de Salud.

Contiene tres secciones: en la primera sesión se proporciona un marco general de las variables y los conceptos teóricos de los GAM que explican los distintos periodos de toda sesión grupal y de toda experiencia colectiva. En la segunda parte se presenta el proceso de evolución de los GAM donde los coordinadores describen su percepción del grupo al inicio de la experiencia y al final de esta. En la tercera sección se integran los datos presentados por los coordinadores acerca del desarrollo de sus grupos y por los testimonios de los miembros del GAM (OPS, 2016)



En el campo de las adicciones, una manera adecuada de combatirlas, es a través de la ayuda profesional como la de un psicoterapeuta, un psicólogo, un psicoanalista o un psiquiatra; sin embargo los grupos de autoayuda son una alternativa adecuada y complementaria a la ayuda profesional. En el peru se cuenta con algunos centros de autoayuda para combatir las adicciones.



Alcohólicos Anónimos es una comunidad de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo.


Al-AnonSu propósito es ayudar a los familiares y amigos de alcohólicos a recuperarse de los efectos de vivir o haber vivido con el problema de alcoholismo de un pariente o amigo. 





Narcóticos Anónimos. Este grupo ayuda a combatir la adicción a las drogas como marihuana, heroína, cocaína, anfetaminas u otras. Es gratis y confidencial.


Nar-Anon. Para personas que se preocupan por un familiar que consume drogas.





Jugadores Anónimos. Para las personas que que juegan demasiados en el casino y en los videojuego. Cada vez son más jóvenes los afectados que acuden en busca de ayuda a esta asociación.

Comedores Compulsivos. Para personas que ciertos alimentos le despiertan comportamientos compulsivos de comer.

Adictos al Sexo anonimos (SAA). para las personas a quienes los comportamientos sexuales o románticos deterioran su vida (pornografía, conquistas amorosas, infidelidad, culpa frente a la sexualidad o abuso sexual) En Lima hay dos grupos. El primero es Sexólicos Anónimos (SA) y el otro grupo es Sexo Adictos Anónimos (SAA).

Mujeres que Aman Demasiado (MAQAD). Es un grupo de auto ayuda que trata sobre la adicción a las personas.

Es una Asociación española  sin animos de lucro de ámbito nacional,  inscrita en el Registro Nacional de Asociaciones del Ministerio del Interior con cede central en IBIZA (Islas Baleares, España) . Sus objetivos son:   Promover LA RECUPERACIÓN EMOCIONAL de mujeres afectadas por el “Síndrome de Amar Demasiado” (S.A.D.) , Fomentar la formación de GRUPOS DE AUTOAYUDA en toda localidad donde residan mujeres interesadas, contribuir a LA PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO  y  contribuir a LA IGUALDAD real y cotidiana de las mujeres en el ámbito privado.

Comentario analitico

A partir de los distintos ámbitos del trabajo social, los grupos de autoayuda, fomentan el trabajo comunitario que desde la practica se plantea.  Estos grupos permiten  la participación directa de las personas en sus problemas,  facilitando que estos participen en sus propios cambios y ayuden a otros a través del proceso del grupo.Asimismo, el trabajo a traves de estos grupos, permite una mejora en la calidad de ayuda, consiguiendo a su vez un aumento de la autoestima y una mayor participacion en la comunidad de los grupos mas desfavorecidos.

Conclusiones

No solo los hospitales, clínicas, congregaciones de tipo religioso  o centro de rehabilitación pueden brindar ayuda a personas con problemas físicos y mentales,  sino que existen otras formas de hacerlo, por ejemplo, los grupos de autoayuda.

Los grupos de autoayuda suponen un recurso importante a utilizar desde el Trabajo Social. En ellos se crean vínculos sólidos y se amplían las redes sociales de sus miembros.




Enlaces








Bibliografía

Tenorio, M. (2009). grupos de ayuda mutua con mujeres victimas de violencia. Psicol 17(1). recuperado el 10 de noviembre del 2016 de http://www.unife.edu.pe/pub/revpsicologia/milenatenorio.pdf

Domenech, Y. (s.f.). los grupos de autoayuda como estrategia de intervencion en apoyo social. Universidad de Alicante. recuperado el 18 de Noviembre del 2016 de https://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/5802/1/ALT_06_08.pdf

Organizacion Panamericana de la Salud (2016). Proceso grupal: sistematización de la experiencia de los Grupos de Ayuda Mutua (GAM)



sábado, 12 de noviembre de 2016

PSICOLOGIA COMUNITARIA Y LA EDUCACION AMBIENTAL COMUNITARIA




INTRODUCCION
La educación ambiental tiene como eje de sus reflexiones las relaciones entre la sociedad, la naturaleza y las culturas (Trellez, 2015). Para lograr la construcción de futuros sustentables es sumamente importante y a la vez necesaria la participación de las comunidades quienes pueden aportar sus propias realidades y visiones, contribuyendo de este modo al desarrollo de los cambios y las acciones necesarias para alcanzar una mejora de la situación ambiental. Durante este proceso, el rol de la Psicología comunitaria es crucial para conseguir dicho objetivo.


Por otro lado, la educación ambiental precisa acercarse cada vez más a las realidades concretas de las poblaciones, para poder vincularse a los procesos de planificación hacia la sustentabilidad de manera activa es asi, que la participación real de las poblaciones y la educación ambiental comunitaria pueden aportar caminos innovadores y creativos para la construcción colectiva de futuros sustentables (Trellez, 2015).

CONTENIDOS

1. UN PRIMER ACERCAMIENTO



La educación ambiental comunitaria expresa una trascendental expresión de la educación ambiental, que en América Latina ha venido desarrollándose de manera intensa en los últimos años. Desde 1972, año de la suscripción de la Declaración sobre el Medio Humano, en la reunión de Estocolmo, se han tenido expresiones concretas y compromisos relativos al desarrollo sostenible en el mundo. En la citada Declaración se afirmaba que "el hombre tiene el derecho fundamental a la libertad, la igualdad y al disfrute de condiciones de vida adecuadas, en un medio de calidad tal que se le permita llevar una vida digna y gozar de bienestar, y tiene la solemne obligación  de proteger el medio para las generaciones presentes y futuras" (Trellez, sf).


Es asi que se llevó a cabo reuniones en diferentes países  donde se efectuaron trascendentes debates y se ampliaron las visiones del nuevo tipo de educación para el futuro. Algunos de estos interesantes aportes expresan que “La Educación Ambiental debe apuntar a contribuir al bienestar colectivo y preocuparse por la supervivencia de la humanidad"  (Helsinki, 1977, citado en Trellez, sf) asimismo,  “la Educación Ambiental además de orientarse hacia la comunidad, debe involucrar al individuo en un proceso activo, es decir,  que resuelva los problemas que surjan en el contexto de realidades específicas, fomentando la iniciativa, la responsabilidad y el sentido prospectivo de un mañana mejor" (Tbilisi, 1977, citado en Trellez, sf).

2. EDUCACIÓN AMBIENTAL COMUNITARIA



“La Educación Ambiental es un proceso formativo mediante el cual se busca que el individuo y la colectividad conozcan y comprendan las formas de interacción entre la sociedad y la naturaleza, sus causas y consecuencias, a fin de que actúen de manera integrada y racional con su medio" (Cesar et al, 1992)

Para Trellez (2015) es un proceso altamente dinamizador y escencialmente participativo, se centra en las relaciones dinámicas entre la sociedad y la naturaleza.


3. CARACTERISTICAS DE LA  AMBIENTAL COMUNITARIA
  • Es una educación con la comunidad, eminentemente participativa.
  • Es una educación para compartir conocimientos.
  • Es una educación interdisciplinaria, transdisciplinaria, hacia el pensamiento complejo y la construcción del saber ambiental
  • Es una educación integradora y multitemática
  • Es una educación teórico-práctica hacia la acción
  • Es una educación colectiva, hacia la construcción colectiva del conocimiento
  • Es una educación para diseñar y construir futuros alternativos


4. ELEMENTOS DE LA EDUCACIÓN AMBIENTAL COMUNITARIA
La educación ambiental comunitaria se enmarca conceptualmente en una serie de elementos de reflexión y de acción, que pueden resumirse en siete 7 aspectos principales (Trellez, 2015)

a. La comunidad: Es el tema central de la educación ambiental comunitaria, junto con el concepto de ambiente. Se constituyen en los protagonistas principales de todo proceso educativo referido al ambiente.


b. La territorialidad: se constituye en una de las bases de la educación ambiental comunitaria.



c. La cosmovisión

d. La interculturalidad y la interdisciplinariedad; decir, la interacción entre diversas culturas, como un elemento básico de la educación ambiental comunitaria. En este proceso debe primar el respeto y el diálogo hacia una mejor y mayor comprensión mutua. Adicionalmente, requiere ser interdisciplinaria e integradora, establecer puentes entre la academia y la comunidad, impulsar la sinergia entre diversos actores.

e. La participación y la ciudadanía

La llamada participación pública se orienta a que los grupos sociales puedan implicarse en toma de decisiones sobre políticas, planes o proyectos con los cuales tienen relación o intereses. 


f. Los abordajes metodológicos:


la educación ambiental comunitaria, al ser definida como educación participativa requiere reflejar este enfoque en metodologías eminentemente participativas.



g. La ética y la cultura ambiental
Considerada una filosofía de vida, del respeto y del amor a la vida, a la naturaleza y a los semejantes. No está definida en códigos específicos, sino que hay que construirla, participativamente.


5. EDUCACIÓN AMBIENTAL DESDE UN ENFOQUE COMUNITARIO


Trabajar la Educación Ambiental desde un enfoque comunitario es promover y capacitar al individuo como agente activo de su propio desarrollo y el de su comunidad. Es imposible que una comunidad asimile una educación ambiental, si  cuando se se aspira a poner en práctica, no se cuestiona esa demanda. No basta con hacerle entender a la comunidad lo valioso de la protección, conservación, la sostenibilidad si ella misma no llega a cuestionarse que es parte de esa necesidad (Trellez, 2015). Es vital  que la comunidad perciba que el proyecto educativo se establece desde el interior de sus demandas, de sus iniciativas y desde su propio quehacer (Montero, 2004).


Según Trellez (2015), la educación ambiental, en su enfoque comunitario,  debe cumplir varios requisitos fundamentales: es una educación junto con la comunidad y eminentemente participativa; busca compartir (no impartir) conocimientos; es un proceso interdisciplinario, hacia el pensamiento complejo; es una educación integradora, multitemática y teórico-práctica, hacia el pensamiento crítico y la acción; busca la construcción colectiva del conocimiento, y se orienta al diseño y la construcción conjunta de futuros alternativo.

COMENTARIO

La educación ambiental comunitaria requiere especiales esfuerzos para contribuir a la construcción de ese nuevo saber ambiental para lo cual se precisan alternativas metodológicas y acercamientos que permitan la formación para la acción y el pensamiento creativo.

Como parte de la educación ambiental comunitaria es importante innovar y  buscar nuevos métodos de trabajo participativo que permitan lograr un enfoque sistémico en el análisis de los problemas y las diversas situaciones ambientales. Es evidente que una escasa creación de espacios de reflexión conjunta puede limitar el potencial movilizador hacia el mejoramiento ambiental que tiene el trabajo participativo con las poblaciones.


Es importante considerar que el análisis de las relaciones sociedad-ambiente no es fácil abordar, y que la relación dialéctica individuo-ambiente tampoco lo es, sin embargo, si se trabaja desde un enfoque interdisciplinario los resultados serán más eficientes.

CONCLUSIONES

  • La Educación Ambiental además de orientarse hacia la comunidad, debe involucrar al individuo en un proceso activo.
  • La educación ambiental comunitaria pueden aportar caminos innovadores y creativos para la construcción colectiva de futuros sustentables.
  • La educación ambiental comunitaria, al ser definida como educación participativa requiere reflejar este enfoque en metodologías eminentemente participativas.


ENLACES

REFERENCIAS

Trellez, E. (2015). Educación ambiental y conservación de la biodiversidad en el desarrollo comunitario. Manual guía para comunidades. http://escuelasdeinnovacion.conectarigualdad.gob.ar/pluginfile.php/378/mod_page/content/58/MANUAL_COMUNIDADES.pdf

Quiroz et al (1992). Manual de referencia sobre conceptos ambientales. SECAB, Fundación Konrad Adenauer, Bogotá.

Trellez, E. (s.f). Educación ambiental comunitaria, participación y planificación prospectiva. http://www.vocesenelfenix.com/sites/default/files/pdf/21_0.pdf

Montero, M. (2004). Introducción a la Psicología Comunitaria. Editorial Paidos. Buenos Aires. Argentina.







sábado, 29 de octubre de 2016

LA FAMILIA COMO FACTOR DE RIESGO Y PROTECTOR DE LA SALUD MENTAL






INTRODUCCION

La familia es la institución que permanece a lo largo de la historia de la humanidad (Romero, 2002), es considerada como el principal  núcleo de socialización de sus integrantes (Cid & Pedrao, 2011) y está en la responsabilidad de  guiar a un hijo, desde el nacimiento hasta que logre su autonomía plena, al final de la adolescencia (Romero, 2012).  Si  la familia es una guía y es el medio donde mayor tiempo están los hijos, es fácil considerarla como un factor protector, no obstante, también puede convertirse en un factor de riesgo, cuando por ejemplo en casa hay mucha violencia, insultos y cualquier actividad que afecte contra la salud mental de sus integrantes.

A raíz de lo anterior,  resulta crucial profundizar en  el ámbito  familiar, debido a que ha sido uno de los ambientes mas investigados para buscar factores de riesgo o factores protectores (Quiroz, 2006), de ahí que la pregunta que nos tenemos que hacer es, la familia, ¿es un factor de riesgo o un factor protector de la salud mental?. El presente trabajo se encamina en base a ésta interrogante, reconociendo que lo aportado aquí solo es una pequeña porción del inmenso conocimiento que subyace.


I. GENERALIDADES

1. El concepto de familia

Según Quiroz (2006) la familia es el principal núcleo de interacción social, la principal fuente de influencia que tienen los niños desde que nacen, asimismo es un fenómeno universal que tiene funciones,  como proteger la vida y la crianza, favorecer el desarrollo sano de cada uno de sus miembros, así como la transmisión de las costumbres y tradiciones que conforman la cultura original de un pueblo.

2. El concepto de salud mental

Desde el punto de vista humanista, la salud mental es considerada como un estado relativamente perdurable, en el cual la persona se encuentra bien adaptada, siente gusto por la vida y está logrando su autorrealización (Carrazana, 2002). La salud mental también incluye bienestar subjetivo, autonomía, competencia y reconocimiento de las propias habilidades para hacer frente al estrés y trabajar de manera productiva (OMS, 2004).

Desafortunadamente en muchos países del mundo el concepto de salud mental  no se le toma la misma importancia que la salud física (OMS, 2004)

3. ¿Qué son los factores de riesgo?

Son ciertas características o cualidades de una persona que se encuentran unidas a una elevada probabilidad de dañar la  salud o impedir tener un adecuado desarrollo (Quiroz, 2006)

4.¿Qué son los factores protectores?

Son condiciones o entornos que tienen la capacidad de fortalecer o  favorecer el desarrollo de los individuos (Quiroz, 2006).


II. LA FAMILIA COMO  FACTOR DE RIESGO Y  FACTOR PROTECTOR DE LA SALUD MENTAL

El enfoque ecológico adoptado por la psicología Comunitaria afirma que la conducta de las personas no solo es explicada por factores individuales sino que es imprescindible poner atención en el funcionamiento de las instituciones sociales (Montero, 20049); ahora bien, si la familia es una institución social y como tal, influye directamente en sus integrantes, es importante que sea abordada y reafirmada como un factor protector de la salud mental de las personas, en el sentido de que fomenta en el niño o adolescente las expectativas futuras, permite y facilita la pertenencia a grupos, genera un adecuado desarrollo moral, influye en el desarrollo del autoconcepto y autoestima y previene conductas de riesgo propias del adolescente (Haquin, Larraguibel & Cabezas (2004)

A pesar del peso que tiene la familia en ser considerada como un factor protector, surge la necesidad de intervenir en ella porque también puede funcionar como un factor de riesgo, por ejemplo, el consumo de drogas en la adolescencia debido a malas prácticas en la familia; esto lo demuestra un estudio realizado por Muñoz y Graña  (2001), en la ciudad autónoma de Madrid con 1570 adolescentes; el  objetivo fue analizar la influencia de determinadas variables familiares en el consumo de drogas por parte de los adolescentes. Los análisis de regresión confirmaron que los principales factores de riesgo familiares para explicar el consumo de drogas eran la ausencia de normas familiares sobre el uso de drogas, los conflictos entre los padres y el adolescente y el consumo de alcohol por parte del padre.

Es válido resaltar, que la ausencia de uno de los padres en el seno familiar como el hecho de que uno de los padres vuelva a casarse, son factores de riesgo que predicen el consumo futuro de tóxicos de los hijos (Polaino, 1991, citado en Muñoz y Graña, 2001). Por otro lado, la ausencia de implicación materna, ausencia de disciplina parental, bajas aspiraciones de los padres también predicen el uso de drogas en los adolescentes (Kandel y Andrews 1987, citado en Muñoz y Graña, 2001).


Asimismo, Bragado, Bersabé y Carrasco (1999) sostienen que la crianza de los niños en familias con alto nivel de conflicto es un  factor de riesgo importante tanto para el desarrollo de trastornos de conducta en general  como para el consumo de sustancias.

Contrario a lo anterior las relaciones familiares positivas basadas en un profundo vínculo afectivo entre padres e hijos, constituyen factores protectores que predicen el buen comportamiento de los hijos. En el estudio realizado por Muñoz y Grana (2001) se encontró que uno de los factores de protección más importantes  es tener una buena relación de vínculo con los padres (Muñoz y Grana, 2001).



III. Investigaciones: Factores familiares protectores y de riesgo

Satander et al (2008) realizó un estudio en 825 adolescentes Chilenos, el objetivo fue determinar la prevalencia de factores de riesgo y de protección en los estudiantes chilenos, y estudiar la asociación entre el funcionamiento  familiar  y las conductas de riesgo en adolescentes. Los resultados demuestran que el riesgo de consumir sustancias psicoactivas, estar triste todo el tiempo, desesperarse e inquietarse, es mayor en adolescentes que perciben sus familias  como disfuncionales: vale decir, que una familia disfuncional constituye un factor de riego para los adolescentes.

Asimismo, Haquin, Larraguibel & Cabezas (2004), se encaminaron en un estudio que consistía en determinar factores protectores y de riesgo en salud mental en 1069 niños  y adolescentes de la ciudad de Cálama. Se encontró que  los factores de riesgo predominantes eran, falta de destrezas sociales y pertenencia a grupo, bajo autoconcepto/autoestima y situación familiar irregular. Los factores protectores más frecuentes eran: expectativas futuras, ausencia de conductas de riesgo social, de alcohol, drogas y ausencia de maltrato. El estudio demuestra que las familias pueden llegar a ser un medio de intervención para fomentar factores protectores y disminuir factores de riesgo.

En esta misma linea, Pedrao (2011) realizo un estudio transversal en adolescentes chilenas cuyo objetivo fue verificar los factores familiares protectores y de riesgo relacionados al consumo de drogas; se encontró que los factores de mayor riesgo, fueron el modo de enfrentar los problemas, y dentro de estos, la falta de apoyo religioso y la búsqueda de apoyo profesional, conjuntamente con las dificultades de comunicación intrafamiliares.

El ambiente familiar negativo a igual que  el maltrato, también son considerados factores de riesgo y a la vez predictores de la conducta antisocial, esta investigación fue realizada  por Quiroz (2006) en Mexico, los resultados demuestran que los principales predictores de la conducta antisocial son: mayor presencia de hostilidad y rechazo, menor comunicación por parte de los hijos y mayor disciplina negativa por parte de la familia.

Esto conlleva a pensar que debemos prevenir dicha problemática mejorando las relaciones familiares y brindándole a los adolescentes un ambiente familiar positivo que les permita un sano desarrolló (Quiroz, 2006).


COMENTARIO ANALITICO

La familia representa una estructura dinamica conformada por dos caras de una misma moneda, por un lado es un factor protector y por otro representa un factor de riesgo, es sobre la base de este último que se debe empezar a trabajar, a partir de ello surge la necesidad de desarrollar intervenciones específicas encaminadas no solamente a reducir los factores de riesgo como menciona Velasquez et al (2002), sino a elaborar intervenciones que promuevan el desarrollo de factores protectores en la familia como por ejemplo el entrenamiento de los padres en las habilidades de la crianza, la comunicación, la supervisión, la interacción social, y las actividades planeadas;  es importante enseñar habilidades sociales a los hijos y enseñar  a controlar su ira y a solucionar sus problemas.


CONCLUSIONES

La familia como tal presenta una dicotomia de funciones, por un lado es un factor protector y por otro, es un factor de riesgo de la salud mental.

Los estudio descritos rescatan la importancia de la función de protección de la familia y la prevención de conductas de riesgo. Asimismo promueven la urgencia de promover acciones para fortalecer a la familia, considerándola como un factor protector importante en la prevención de conductas de riesgo en adolescentes.

A partir de ello surge la necesidad de crear programas orientados al refuerzo de la comunicación y fortalecimiento de lazos saludables en familias con hijos adolescentes.



Enlaces





Referencias bibliograficas


Carrazan, V. (2002). El concepto de salud mental en psicología humanista–existencial. Scielo; 13 (1), http://www.scielo.org.bo/pdf/rap/v1n1/v1n1a01.pdf
Organización Mundial de la Salud (2004). Invertir en Salud Mental, http://www.who.int/mental_health/advocacy/en/spanish_final.pdf
Muñoz, M & Graña, J. (2001). Factores familiares de riesgo y de protección para el consumo de drogas en adolescentes. Psicothema; 13(1):87-94. http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=72713113

Montero, M. (2004). Introduccion a la Psicologia comunitaria. Argentina. Editoria Paidos.

Satander et al, (2008). Influencia de la familia como factor protector de conductas de riesgo en escolares chilenos. Rev Méd Chile; 136: 317-324  http://www.scielo.cl/pdf/rmc/v136n3/art06.pdf.   
Haquin, C.; Larraguibel, M. & Cabezas, J. (2004). Factores protectores y de riesgo en salud mental en niños y adolescentes de la ciudad de Calama. Revista chilena de pediatría, 75(5), 425-433 http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0370-41062004000500003
Romero, R. (2003). Factores protectores a nivel familiar. Departamento de Pediatría Obstetricia y Ginecología. Universidad de Valencia,  http://www.uv.es/~colomerj/fundacion/familia.htm
Quiroz, N. (Nieves). La familia y el maltrato como factores de riesgo de conducta antisocial. Tesis para obtener el grado de licenciada. Mexico. http://www.uade.inpsiquiatria.edu.mx/pagina_contenidos/tesis/tesis_nieves.pdf
Pedrao, J. (2011). Factores familiares protectores y de riesgo relacionados al consumo de drogas en adolescentes. Revista Latino-Am.Enfermagem, 19 (), 738-745, http://www.producao.usp.br/bitstream/handle/BDPI/3149/art_PEDRAO_Factores_familiares_protectores_y_de_riesgo_relacionados_2011.pdf?sequence=1&isAllowed=y